El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación habló sobre los avances del sector.
Junto con el de Deportes, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación es una de las carteras más jóvenes del país. En su corta trayectoria de cuatro años, por ahí ya han pasado dos ministros, el segundo de ellos, el exrector de la Universidad de la Costa, Tito José Crissien Borrero, quien con la finalización del gobierno del presidente Iván Duque el próximo 7 de agosto, también culminará su periodo.
En entrevista con EL TIEMPO, Crissien hizo un balance de los avances que se han conseguido en el país en materia de ciencia, tecnología e innovación, entre los que destaca haber conseguido alcanzar la meta de destinar el 1 por ciento del PIB a actividades de CTeI (lo que se conoce como Acti), aunque reconoce que en materia de los que se destina para investigación y desarrollo (I+D) –el indicador con el que se comparan los países de la Ocde– Colombia aún continúa rezagado, en su opinión debido a problemas en la metodología que se usa para elaborar esta medición.
¿Qué tanto aportó la ciencia y el ministerio para hacerle frente a la pandemia?
La ciencia salvó vidas a través de las vacunas, con su desarrollo e implementación se lograron mitigar las consecuencias de la pandemia. Pero también logramos invertir 234.000 millones de pesos en el fortalecimiento de 91 laboratorios a nivel nacional, más exactamente en 28 departamentos. El objetivo fue fortalecer no solo el diagnóstico contra el covid-19, también para enfermedades tropicales, tales como el zika, el chikungunya, el dengue y todas estas enfermedades que siempre están presentes. Por la tanto, tenemos una fortaleza regional, para que los departamentos puedan tener diagnósticos más rápidos y certeros.
¿Cómo cierra el Gobierno Nacional la inversión en Ciencia, Tecnología e Innovación, teniendo en cuenta que en algún momento se redujo, según cifras del OCyT?
Alcanzamos el 1,01 por ciento del PIB como inversión en actividades de Ciencia, Tecnología e Innovación, este dato es del OCyT (Observatorio de Ciencia y Tecnología). Lo que se redujo en algún momento fue el presupuesto del MinCiencias, pero era un presupuesto que se le podía recortar ciertas cosas. Lo importante es que el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, con beneficios tributarios, regalías, más el presupuesto General de la Nación, más los presupuestos de los Institutos Públicos de Investigación, más lo que invierten las universidades públicas y privadas ha aumentado, tanto que pasamos de un 0,63 por ciento en el 2018 a 1,01 por ciento del PIB en el año 2021. Sabemos que cuando este 2022 termine, superaremos el 1,01 por ciento.
La Misión de Sabios recomendaba que esa inversión debe ser privada y pública ¿Hoy cómo están las cargas?
Es cierto, tiene que haber una fuerte inversión pública en el ciclo de la Ciencia. Tenemos tres ciclos: Ciencia, Desarrollo Tecnológico e Innovación. En el primer ciclo, en donde está la generación del conocimiento, tiene que haber una mayor financiación del sector público; en el desarrollo tecnológico tiene que haber una mezcla; y en la innovación mucho más del sector privado. En Colombia tenemos el 70 por ciento de la inversión en CTeI del sector público y un 30 por ciento del sector privado. Países desarrollados como el Reino Unido y Estados Unidos tiene un 70 por ciento del sector privado y un 30 por ciento del sector público. Esto demuestra que son una sociedad basada en el conocimiento que descubrieron e que en la Ciencia, la Tecnología y la Innovación hay un buen negocio.
Durante este gobierno se destinaron 3,4 billones de pesos a proyectos de ciencia ¿En qué campos se está trabajando?
Estamos siguiendo la Misión Internacional de sabios. Tenemos ocho focos: biotecnología, bioeconomía, energías sostenibles, océanos y recursos hidrobiológicos, ciencias sociales y humanas, industrias culturales y creativas, ciencias de la salud y la vida y tecnologías 4.0, en eso tenemos el derrotero.
¿Después de cuatro años, cree que se ha consolidado la figura del ministerio?
Estoy totalmente seguro de que lo logramos. Creamos el ministerio casi unánimemente y pudimos construir la política pública a través del Conpes 4069. Además, generamos el decreto de gobernanza que nos trae dos nuevos consejos, el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación y el Consejo Científico Nacional.
¿Qué retos le quedan a la cartera?
El principal reto es incrementar los recursos, porque el 1,01 por ciento del PIB, aunque es la cifra más alta de la historia, sigue siendo insuficiente. Para la ciencia siempre se necesitarán más recursos, ojalá al final del próximo gobierno lleguen a un 2 por ciento en Actividades de Ciencia, Tecnología e Innovación, sobre todo invirtiendo en ciencias básicas, en ciencias naturales y exactas, que son el principio del ciclo. También nos hace falta seguir fortaleciendo la política de becas de maestrías y sobre todo de doctorados.